Josef Salvany Lleopart

Junto con Balmis, fue otro médico cirujano y militar, la otra parte del alma de la expedición.

Nació en Cervera, Catalunya, entre 1777 y 1778 y siguió los pasos de Balmis, entrando en el Colegio de Cirujanos de su ciudad y accediendo luego al ejército, como cirujano militar. Era muy bueno en su trabajo, pues tanto sus diagnósticos como sus tratamientos siempre eran exactos, aunque tuvo que abandonar este camino debido al paludismo que padecía (crisis palúdicas que no eran graves pero que debilitaban su salud, derivadas de haber contraído la Malaria). Debido a las necesarias temporadas de descanso termal, acabó optando por un puesto más tranquilo en el Colegio de Cirugía de Barcelona, donde se incorpora a la Expedición a petición del propio Balmis.

Durante esta expedición y como subdirector de la misma recorre los territorios de Colombia, principalmente, pero también Ecuador, al manifestarse una epidemia de viruelas en Quito, terminando sus pasos en Perú, donde caería finalmente enfermo de la tuberculosis pulmonar que comenzó a manifestarse en Bogotá, en el año 1804 donde, además, perdió la visión de un ojo. Sin embargo, aun seguirá por Lima, vacunando a más de veinte mil personas, mérito por lo cual recibió de la Universidad de San Marcos (Lima, Perú) el título de licenciado y doctor en Medicina, y llega hasta Bolivia con un estado de salud muy deficiente, vomitando sangre y muy débil.

Agravando su ya de por sí frágil salud a causa de los numerosos viajes y contratiempos variados (una revuelta indígena en Chocope, robo de sus provisiones y monturas en Lambayeque), a la malaria con la que partiese de España y la tuberculosis manifestada en Colombia se sumaría la difteria, y un problema óseo en la muñeca de habérsela dislocado y no haber sido tratada y curada bien. Su objetivo personal era llegar hasta Buenos Aires, pero fallecería antes de conseguirlo, a los treinta y cuatro años de edad en 1810, de estas múltiples enfermedades y afecciones, en Cochabamba, Bolivia. Sin embargo, en tan solo siete años, este hombre recorrió más de dieciocho mil kilómetros para expandir la vacuna entre los americanos, vacunando con ello a cientos de miles de personas.

Josef Salvany Lleopart

Cochabamba, Bolivia. Año 1855